TAMARINDO
Dr. Arcenio Estévez Medina
Nombre
común: tamarindo (español) y “tamarind” (inglés).
Nombre
científico: Tamarindus
indica.
Familia:
fabácea.
Origen:
el tamarindo proviene de la India.
Descripción
El árbol del
tamarindo es una planta de gran longevidad y que puede crecer más de 25 metros
de altura. Sus hojas tienen bordes
enteros, son pequeñas, de color verde, ovaladas, perennes y muy agrias. Las flores de esta especie vegetal tienen
gran fragancia y son de color blanco, aunque en algunos casos pueden ser
amarillas. Esta planta tiene un fruto en
forma de vaina, con cáscara dura, pero que se desprende de manera fácil cuando
está maduro. En su interior hay varias
semillas (pueden llegar hasta a diez), envueltas por una pulpa comestible de
sabor muy agrio, aunque hay algunas especies que son dulces.
Se
conocen árboles del tamarindo que tienen más de 100 años y aunque muchos
botánicos afirman que dura unos 50 años produciendo frutos, se reportan algunos
ejemplares centenarios que todavía dan frutas muy dulces.
Usos
populares
El uso más común del
tamarindo es el jugo hecho con la fruta madura, el cual es muy buscado por sus
propiedades refrescantes. Las hojas en
decocción son utilizadas con frecuencia para descender los niveles de glucemia
en personas diabéticas y para enfermedades que cursan con ictericia.
Las hojas tiernas se pican
en trocitos pequeños y de esta manera son consumidas junto a lechuga, tomate,
berro y rábano; dándole un sabor agrio a ese plato, que evita el uso de vinagre
en la preparación de estos alimentos tan consumidos por algunos segmentos de la
población general.
La madera de esta
planta es dura y por eso es muy utilizada en la elaboración de cabos para
herramientas como pico, pala, martillo, machetes y cuchillos. También se emplean en muchos países para
fabricar muebles y otros productos de ebanistería.
La parte comestible de
las vainas, en jugo, es empleada como laxante, de igual manera se usa en infecciones
de la faringe. En numerosas poblaciones
rurales, para el dolor de garganta, se cogen los frutos tiernos triturados, se
hierven, luego de colado, le ponen un poco de sal y se usa para hacer gárgaras
dos veces al día.
Los frutos tiernos se
hierven, luego son servidos y el líquido se echa encima a las verduras, dándole
un sabor de vinagreta al preparado.
Algunas personas lo ingieren de manera directa después de hervido. También se emplean para preparación de
algunas salsas muy buscadas en el mercado internacional.
Las hojas en decocción
son dadas a tomar cuando hay insomnio, para lo que se recomienda una taza,
media hora antes de la persona ir a la cama.
En muchos lugares en vez de las hojas se pide al paciente que ingiera un
vaso de jugo del fruto maduro de esta planta.
Sustancias activas
Esta especie vegetal
contiene pectina, pirazina,
hordenina, ácido oxalosuccínico y tartárico.
Se considera una fruta muy rica en este último principio activo, al que
debe su sabor agrio. Ambos ácidos se han
identificado en las hojas y los frutos del tamarindo.
De
acuerdo a la USDA en 100 gramos de fruto del tamarindo hay 2.8 g de proteínas,
0.6 g de lípidos y 62.5 g de hidratos de carbono.
Contrario a lo que se
piensa, el aporte de vitamina C de la fruta del tamarindo no califica para ser
una buena fuente de este importante micronutriente, pues apenas ofrece un 6 %
de las recomendaciones diarias del mismo, con 3.5 mg en 100 g.
Actividad
farmacológica y usos con base científica
La
parte comestible del fruto se prepara con sal y se da a tomar a las personas
que han tenido intoxicación con digitálicos.
Siempre y cuando el enfermo pueda ingerir alimentos sin dificultad esto
ayuda bastante en la evolución satisfactoria de este problema de salud.
La
Organización Mundial de la Salud, afirma que el tamarindo es una buena fuente
de aminoácidos indispensables (esenciales) y el único que no contiene de los
ocho conocidos es el triptófano. Esto
nos presenta a dicha fruta como una buena opción nutricional.
El
fruto maduro comido al natural y tomado como bebida refrescante es laxante,
para lo que se ingiere un vaso tres veces al día. De hecho, la página fitoterapia.net recomienda
al tamarindo como un alimento útil para el manejo del extreñimiento, gracias a
la acción farmacológica de ácidos orgánicos y pectina, presentes en la fruta de
esta planta.
Un
estudio citado por L. Robineau (1989), demuestra la acción antibacteriana de
las hojas del tamarindo, tanto en extracto etanólico como acuoso en contra de
varios microorganismos. El extracto
etanólico del fruto mostró actividad en contra de las bacterias Bacillus subtillis, Salmonella typhi, Staphylococcus
aureus, Vibrio cholera y Escherichia coli. Este autor también recomienda el uso de las
hojas de esta especie vegetal en caso de hepatitis.
Contraindicaciones
y precauciones para su uso
Por su efecto laxante
puede producir diarrea y deshidratación importante, si se utiliza con mucha
frecuencia el fruto de esta planta.
Tiene efecto diurético
y por tanto, no se debe ingerir en cantidades excesivas cuando se estén tomando
medicamentos para la hipertensión arterial.
El tamarindo no deben ingerirlo las personas que tienen diarrea porque podría empeorar esta situación de salud.
BIBLIOGRAFÍA
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y ¿A qué sabe? Nutricion y
Farmacia.. Disponible: https://nutricionyfarmacia.es/blog/dietetica/alimentos/tamarindo-beneficios/. 22 de noviembre de 2021
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Reino Unido: CAB International. www.cabi.org/isc. Última modificación 18 de marzo de 2021.
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Curativas, usos populares y científicos.
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futuro. Tamarindus indica - L.
Consultado el 21 de enero de 2023. Disponible
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Robineau L. Hacia una Farmacopea Caribeña. Seminario Tramil 4. Tela, Honduras, 1989.
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Cañigueral Salvador. Tamarindo. Disponible en Fitoterapia. net. En: https://www.fitoterapia.net/vademecum/plantas/tamarindo.html. Consultado el 21 de enero de 2023.